Luego de muchos días en la cual la consigna era solo vivir el día como si fuera el último, y vaya que dio resultados bastantes satisfactorios, he decidido volver al redil de bites. Otro Año Nuevo sui generis -que al parecer ya se está haciendo una constante- que pasé con una nueva turista del amor. Aunque creo será una pasajera frecuente en mi ruta a la enajenación.
Y como para que no se esté diciendo por allí que este mortal ahora se dedica a cantar puros aleluyas, salves y alabares, he decidido hacerme una nueva lobotomía con música decente digna de ser tocada en todo bautizo, pollada, velorio, matiné, despedida de solteros o matrimonios hetero, gay, trans, etc. con el nuevo descubrimiento -para este mortal- del grupo Globus que tiene su página web aquí
Este vídeo está editado con imagenes originales de la Segunda Guerra Mundial, y el tema de fondo se llama Preliator. Una buena canción para empezar el año y presionar el gatillo.