Luego de tantas plegarias a Belzebú, el arcángel Luzbel les ha concedido el privilegio de poder gozar con los temas de cuna -son buenas para arrullar a los nenes cuando están con sueño, y claro, mucho mejor que hacerlos oír a Mozart- de la legendaria banda inglesa IRON MAIDEN, que está ahora mismo brindando a toda la feligresía metalera limeña -para jolgorio de la gentita, y temor de los padres al ver sus hijos poseídos por el mismísimo diablo en trance apocalíptico- un aclamado espectaculo.
Muchos muchachitos traviesos han pernoctado en las afueras del Estadio Nacional, demostrando su reverencia y fervor a los embajadores del Averno celestial. Hoy pasé por el estadio un par de veces, y pude sentir la energía que brotaba por las calles aledañas al Coloso José Diaz. Y es que este grupo inglés ha decidido empezar el año 2009 con una gira impresionante por toda Latinoamérica, agotando todas las entradas en cada lugar que se presentaron. Desde la Ciudad de México hasta Buenos Aires, pasando por Bogota y creando expectativa en Brasil, donde ha realizado cinco de seis presentaciones y todas con localidades extintas.
Pero el único lugar donde -según los reportes de la empresa de espectáculos que los trae- no se han agotado las entradas al cielo, es el Perú. ¿Es que acaso no hay demasiados metaleros que sepan valorar la presencia de esta banda de culto???..... Se han lanzado al mercado 40,000 entradas que son la llave para el Infierno, pero de los cuales, solo 35,000 devotos de este grupo han decidido pagar su boletos al paraíso. Es decir que no habrá un lleno total. A pesar de tener de teloneros a la banda local M.A.S.A.C.R.E. y otros más, pero que al parecer no ha despertado demasiado entusiasmo. Así que si hubiesen querido un lleno total, debieron tener en exclusivo a este individuo.
Grande Tongo, el Eddie Vedder peruano. No te mueras nunca, maestro. ".......Sufre metalero, sufre ......"